Se describe una metodología que combina el cultivo de células automatizadas con alto contenido de imágenes para visualizar y cuantificar múltiples procesos celulares y de las estructuras, de un modo de alto rendimiento. Estos métodos pueden ayudar en la anotación más funcional de los genomas, así como identificar las redes de genes de enfermedades y los posibles objetivos farmacológicos.