– [Narrador] Junto al retículo endoplásmico, o ER, en las células eucarióticas se encuentra el aparato de Golgi, una colección de compartimentos unidos a la membrana en forma de disco con dos caras distintas, cis y trans. Cada porción contiene enzimas únicas y proteínas de tráfico, que son responsables de las modificaciones y la clasificación adecuada de proteínas y lípidos. Los grupos tubulares que se encuentran más cerca de la sala de emergencia conforman la red cis Golgi, donde entran por primera vez las proteínas y los lípidos. Las moléculas pueden moverse a través de los segmentos del medio, llamadas cisternas, comenzando con la cisterna cis. Aquí, se someten a glicosilación y desglicosilación, la adición y eliminación de moléculas de azúcar. Luego, las proteínas pasan a las cisternas mediales y trans, donde sufren más glicosilación, además de fosforilación y sulfatación, la adición de fosfato y grupos sulfónicos. Estas modificaciones hacen que las proteínas sean funcionales en su destino final. Más lejos de la sala de emergencias se encuentra la red trans Golgi, donde las proteínas reciben etiquetas de destino. Por ejemplo, una etiqueta de manosa 6-fosfato dirigirá las proteínas a los lisosomas para la digestión. Dependiendo de su etiqueta, las vesículas de transporte serán enviadas a destinos específicos. Por ejemplo, a la membrana plasmática o a las vesículas secretoras, que liberan su contenido de la célula cuando se activan.