El manuscrito presenta un protocolo quirúrgico mínimamente invasivo de preservación de nervios y músculos para descomprimir los nervios occipitales con el objetivo de mejorar la neuralgia occipital.
La neuralgia occipital (ON) se destaca como una de las formas más angustiantes de trastornos de dolor de cabeza, que se distingue por dolor persistente en la base del cráneo, dolores de cabeza occipitales recurrentes y disestesia o alodinia del cuero cabelludo. ON es conocida por su implacable agonía, que afecta gravemente a la vida de los afectados. El dolor incesante, que a menudo se irradia hacia arriba desde la base del cráneo hasta el cuero cabelludo, puede ser profundamente debilitante. Los pacientes con frecuencia soportan dolores de cabeza occipitales insoportables, lo que hace que incluso las actividades diarias rutinarias sean un desafío formidable. La carga añadida de la disestesia o alodinia del cuero cabelludo, en la que estímulos aparentemente inocuos provocan un dolor intenso, agrava el sufrimiento. Esta neuralgia surge principalmente de la compresión mecánica ejercida sobre los nervios occipitales a lo largo de la línea nucal. En este trabajo, presentamos una técnica mínimamente invasiva de preservación de nervios y músculos destinada a aliviar esta compresión sobre los nervios occipitales. El diagnóstico preciso y el tratamiento eficaz son primordiales para brindar alivio a las personas que luchan contra esta afección. Los bloqueos nerviosos con anestesia local se han convertido en una piedra angular del diagnóstico, ya que sirven como confirmación de la neuralgia occipital y como una posible intervención terapéutica. Estos procedimientos ofrecen información crucial sobre la fuente del dolor, al tiempo que ofrecen un respiro transitorio. Sin embargo, el verdadero avance radica en la técnica innovadora que proponemos, un procedimiento que aborda la compresión mecánica en la línea nucal, que es un factor importante que contribuye a la neuralgia occipital. Al descomprimir cuidadosamente los nervios occipitales afectados, al tiempo que se preserva su integridad y el tejido muscular circundante, este enfoque mínimamente invasivo ofrece a los pacientes un camino potencial hacia un alivio sostenido. Sorprendentemente, el procedimiento se puede realizar bajo anestesia local, lo que reduce la invasividad de las cirugías tradicionales y minimiza el tiempo de inactividad del paciente.
La neuralgia occipital (ON) es una afección crónica de dolor de cabeza que causa un dolor sordo persistente en la parte posterior dela cabeza. El dolor, que difiere de las migrañas típicas, suele ser resistente a los tratamientos estándar para la migraña debido a la compresión mecánica de los nervios occipitales2, especialmente a lo largo de su curso a través de la línea nucal3. Por otro lado, las opciones quirúrgicas pueden ser efectivas, pero implican procedimientos invasivos y tiempos de recuperación prolongados 4,5. Presentamos aquí un enfoque novedoso de los nervios occipitales, que permite una descompresión mínimamente invasiva, un tiempo de inactividad mínimo y la preservación de las ramas musculares y nerviosas sensibles6.
El diagnóstico de la ON se basa en bloqueos nerviosos específicos, que reducen temporalmente el dolor y ayudan a identificar el área exacta de compresión nerviosa7, guiando la descompresión quirúrgica 8,9. A diferencia del tratamiento típico de la migraña, nuestro enfoque se centra en la causa mecánica raíz de la ON, proporcionando una opción terapéutica viable más allá de la medicación.
Numerosos estudios clínicos y anatómicos han conducido a la técnica de descompresión del nervio occipital descrita en 2,3,10,11,12,13. Aunque se ha demostrado que esta técnica es segura y eficaz, las ventajas de la técnica mínimamente invasiva que se presenta aquí incluyen la reducción de la morbilidad del paciente, la reducción de los períodos de recuperación postoperatoria y la reducción de los riesgos de dolor inducido por la iatrogenia debido a la posible formación de neuromas. En particular, la preservación de las estructuras neurales y musculares contribuye a obtener resultados rápidos y favorables. Los nervios occipitales mayor y menor pueden exponerse y descomprimirse a través del abordaje descrito. Para el propósito de este trabajo, solo se describe una mayor descompresión del nervio occipital para mejorar la neuralgia occipital, que se debe a una neuralgia occipital menor. El tercer nervio occipital es responsable de casos raros de neuralgia occipital en nuestra práctica, que se abordan con un enfoque separado debido a su localización medial. La técnica descrita incluye la exploración sistemática del paso del nervio occipital mayor a través del semiespinoso de la cabeza, que puede representar un punto de compresión. Se justifica la investigación adicional y la validación clínica para determinar el alcance total de su eficacia y seguridad.
La neuralgia occipital es una de las formas más debilitantes de dolores de cabeza, principalmente debido al dolor crónico que es incesante. Un estudio sobre la prevalencia del dolor facial en 2009, que a menudo se utiliza como referencia para la neuralgia occipital, encontró una prevalencia de ON de 3,2 por 100.00014. Estas estadísticas subestiman en gran medida el problema, sabiendo que la ON es responsable del dolor facial solo en el 8,3% de los casos y que hasta el 25% de los casos de ingreso en urgencias son por cefaleas debidas a neuralgia occipital15.
Encontramos en nuestra práctica que la ON sola o en combinación con otras migrañas es una de las formas más prevalentes de dolores de cabeza crónicos, posiblemente debido a una postura mórbida con el cuello en flexión frente a computadoras y teléfonos inteligentes varias horas al día, un estilo de vida sedentario y un tiempo limitado al aire libre.
El abordaje quirúrgico descrito aquí ofrece un medio altamente eficiente de acceder a los nervios occipitales bajo anestesia local. La neuralgia occipital mayor puede coexistir con la neuralgia occipital menor, ya que estos nervios tienen ramas comunicantes y sus territorios se superponen. Al utilizar el mismo abordaje quirúrgico, ambos nervios pueden ser explorados y descomprimidos cuando está indicado6. La aceptación del procedimiento por parte de los pacientes ha sido favorable, con una duración promedio de aproximadamente 45 a 60 min requeridos para su finalización por lado.
La meticulosa identificación y preservación de las fibras nerviosas constituye un sello distintivo de este enfoque. Gracias a la naturaleza mínimamente invasiva del procedimiento que se puede realizar con anestesia local, el operador evalúa la eficacia de la descompresión al final del procedimiento instruyendo al paciente para que realice movimientos de cabeza y conversación, asegurando así la ausencia de puntos de compresión residuales.
Una faceta crucial de este procedimiento radica en el énfasis en la movilización temprana y frecuente de la cabeza, realizada varias veces al día. Esta práctica sirve para disuadir la formación de adherencias entre las fibras nerviosas y la cicatriz quirúrgica, que de otro modo podrían impedir la recuperación.
Es fundamental reconocer que no todos los pacientes son candidatos adecuados para esta técnica. En particular, las personas con fragilidad o niveles elevados de ansiedad pueden no tolerar el procedimiento cómodamente bajo anestesia local pura. En ciertos casos, los pacientes pueden experimentar molestias repentinas, ya que incluso la más mínima manipulación de un nervio occipital inflamado puede desencadenar la activación del nervio. En estos casos, la anestesia local se rocía directamente sobre las fibras nerviosas con un alivio inmediato.
Este abordaje quirúrgico representa una alternativa menos invasiva en comparación con las técnicas de descompresión propuestas anteriormente. Su capacidad para preservar tanto las fibras nerviosas como las musculares contribuye a una notable reducción de las tasas de complicaciones. Postulamos que esta metodología mínimamente invasiva, pero altamente efectiva, ampliará la accesibilidad de la descompresión quirúrgica como una opción de tratamiento definitiva para la neuralgia occipital, ofreciendo esperanza a un espectro más amplio de pacientes.
The authors have nothing to disclose.
Los autores agradecen la asistencia técnica de Alexandra Curchod, Yuliethe Martins y el equipo de Filmatik Global. Este trabajo fue financiado en su totalidad por el Global Medical Institute.
30G Needle | 0.3×13 mm, BD Microlance 3, Spain | ||
Bipolar Forceps | McPerson, bipolar forceps, Erbe, Switzerland | 20195 | |
Chlorhexidine | Hibidil, Chlorhexidini digluconas 0.5 mg/mL, Switzerland | 120099 | |
dissection scissors | Jarit supercut, Integra Lifescience, USA | 323720 | |
Doppler | Dopplex DMX Digital Doppler, High Sensitivity 10MHz probe, Huntleigh Healthcare, Wales, United Kingdom | ||
Ethilon 5/0 Suture | Ethicon, USA | 698 G | |
Lidocaine ephinephrine 1% | Rapidocain 1% 10 mg/mL, Sintetica, Switzerland | ||
Lighted retractor | Electro Surgical Instrument Company, Rochester, NY | 08-0195 | |
Magnifying loops | Design for vision, USA | ||
Opsity spray | Smith & Nephew, USA | ||
Sterile gloves | Sempermed sintegra IR, Ireland | ||
Sterillium | Sterillium disinfectant, Switzerland | ||
Surgical blade n.15 | Carbon steel surgical blades, Swann-Morton, England) | 205 | |
Surgical drapes and gauzes | Halyard Universal pack, USA | 88761 | |
Surgical instruments | Bontempi medical Italy | ||
Surgical shaver | Carefusion, USA | ||
Syringe 5cc | BBraun, Omnifix Luer Lock Solo, Switzerland | ||
Triamcinolone 10mg | Triamcort depot 40 mg/mL, Zentiva Czech Republic |