El sistema respiratorio está compuesto por los órganos que permiten respirar. El aire entra en las fosas nasales y la boca, seguido de la faringe (garganta) y la laringe (caja de voz), que conducen a la tráquea. En la cavidad torácica, la tráquea se divide en dos bronquios que permiten que el aire entre en los pulmones. Los bronquios se dividen en bronquiolos progresivamente más pequeños y terminan en pequeños grupos de sacos diminutos en los pulmones, llamados alvéolos, donde se produce el intercambio de gases.
El aire se limpia en la cavidad nasal, pero cualquier cosa que pase esas defensas o entre por la boca puede ser atrapada en los pulmones. Los pulmones producen mucosidad que atrapa las partículas extrañas, y los bronquios y bronquiolos están revestidos de cilios que golpean la mucosidad y los desechos hacia la garganta para su eliminación (es decir, la deglución). Fumar daña a los cilios, lo que dificulta la eliminación del exceso de moco producido por el tabaquismo. Esta es una de las razones por las que los fumadores son más susceptibles a las infecciones respiratorias.
La tráquea es un tubo de 10-12 cm de largo situado delante del esófago que permite que el aire entre y salga de los pulmones. Su cartílago hialino en forma de C mantiene la tráquea abierta. Cuando el músculo liso de la tráquea se contrae, el diámetro de la tráquea disminuye y el aire exhalado se expulsa con gran fuerza (por ejemplo, tos). En los casos de daño en la garganta o la boca que bloquea la respiración, una traqueotomía, un orificio creado quirúrgicamente en la tráquea, puede permitir que el aire entre y salga de los pulmones.
Un solo conducto alveolar al final de un bronquiolo se divide en aproximadamente 100 sacos alveolares, cada uno parecido a un racimo de uvas en un tallo. Cada saco alveolar tiene de 20-30 alvéolos, que parecen pequeñas burbujas, o uvas. Los alvéolos son los sitios de intercambio de gases y tienen contacto directo con los capilares. Esta estructura es crucial para la función de los pulmones, proporcionando oxígeno al cuerpo y eliminando dióxido de carbono, porque maximiza la superficie de los pulmones. Los pulmones contienen 75m2 de superficie de alveolar, el tamaño de un pequeño apartamento!